Cuando una es *joven y alocada* hace muchas cosas que no piensa demasiado: tomar pésimas decisiones, hacer malos planes, ir a lugares dónde no deberías haber ido o estar con gente que no vale la pena. A esa hermosa edad una decide con la intensidad y la impulsividad del festival de hormonas, por creer que una “nunca” va a cumplir 30 y al final la hueá llega más rápido que un suspiro.
Yo me mandé infinitos condoros y me arrepiento de la tracalá de cuestiones. Pienso que perdí mucho tiempo y que podría haber hecho hartas cosas que ahora ya es más compli.
Ahora tengo 36 años y, con harta piscola en el cuerpo, si tuviera en frente a mi yo de 21 le diría algo más o menos así *aclara la garganta*
1- No te esmeres en carretear como si no hubiera un mañana. La parranda después de que encuentras tu primera pega es muchísimo mejor porque SUELDO.
2- Menos mal que no te hiciste tu primer tatuaje a esa edad, seguro ahora lamentarías mucho esa letra china en tu espalda que no sabes lo que significa (y el tatuador de la Santa Lucía, menos).
3- Mochilea. ¡Por Dios!, ¡no es posible que a los 36 no sepas armar una carpa! (además ahora ya no te da para dormir en el suelo, digamosló).
4- Lee más, mucho más. Lee al menos un libro al mes. Anda trayendo siempre un libro en la mochila.
5- Cuida más las amistades que creas que valen la pena, después de los 30 es más difícil encontrar amigos verdaderos. Valora a las personas que te son leales, consérvalas y cuídalas.
6- Desecha de inmediato a las personas que no te aportan en nada, no malgastes el tiempo ni la energía. Desconfía más, hay demasiado lobo vestido de oveja.
7- Disfruta mucho más a tus hermanos chicos, crecen demasiado rápido y no te das cuenta cuando te empiezan a presentar a sus pololas.
8- Anda siempre a todas las onces y cumpleaños familiares, por más lateras que te sean. De vieja valoras esos momentos y no vas a querer llorar por el tiempo perdido.
9- ¡Saca muchas fotos! Es bacán tener registro de los buenos momentos (en mi época no existían las cámaras digitales, MENOS los celulares con ídem, era más difícil la vida).
10- Apenas abandones el nido de la mami ándate a vivir sola. Después compartes con amigos o pololos. Primero aprende a vivir sola los domingos nublados.
11- ¡HAZ DEPORTE, POR LA SÚPER CHUCHA! Cualquier cosa, un par de vueltas a la manzana por último, pero mueve tu cuerpo usando buzo. Tratar de adquirir a los 30 un hábito que nunca tuviste cuesta más que no sé qué.
Ahí quedaste, yo de 20, terrible de retá.