Partamos de la base que emprender no es nada fácil: requiere de mucho trabajo, inversión de plata, tiempo, cansancio, cariño, etc. (las recompensas son hermosas, eso sí). Entonces, cuando empezamos con una mini-pequeña “empresa”, rápidamente se transforma en nuestra guagua, y lo único que queremos es que nuestros amigos la quieran igual que nosotros y nos apoyen, ¿siono?.

La cosa es que hay amigos que quizás no cachan toda la pega que requiere levantar un emprendimiento y llegan y te piden favores gratis o que les hagas descuentos (menos mal a mi me ha pasado muy poco, por algo elijo a mis amigos con pinzas). También llegan conocidos que, con cuea te saludan una vez al año -pa tu cumpleaños y porque se los recordó el feis- sin embargo tienen la mansa perso pa escribirte y pedirte algo.

Así que, para la próxima vez que quiera pedirle descuento a su amigo emprendedor, fíjese, al menos si sabe en qué está su amigo, cómo le ha ido. Luego piénselo mejor y dese cuenta que es una burrada porque pone a su amigo en el manso aprieto, porque entérese que NO VA A PODER DECIRLE QUE NO. 

*El trueque es hermoso y habemos muchos que estamos dispuestos a usarlo, por último busque una manera de pagar que no sea plata*

Apoye el emprendimiento, apoye lo hecho a mano, lo hecho con cariño. Comparta el trabajo de sus amigos en su red social. Apláudalo, recomiéndelo. Sea un amigo como diosito manda.